domingo, 27 de abril de 2014

Literatura/ Umberto Eco / El vértigo de las listas

LAS LISTAS


"La lista está en el origen de la cultura. Es parte de la historia del arte y de la literatura. ¿Para qué queremos la cultura?: Para hacer más comprensible el infinito. También se quiere crear un orden, no siempre, pero a menudo. ¿Y cómo, en tanto seres humanos, nos enfrentamos a lo infinito?, ¿cómo se puede intentar comprender lo incomprensible? A través de las listas, a través de catálogos, a través de colecciones en los museos y a través de enciclopedias y diccionarios. Hay cierto encanto en enumerar con cuántas mujeres se acostó Don Giovanni: fueron 2.063, al menos según el libretista de Mozart, Lorenzo da Ponte. También tenemos listas prácticas: la lista de la compra, el testamento, el menú... que son asimismo adquisiciones culturales por propio derecho."
UMBERTO ECO (El vertigo de las listas / 2009)


LA LISTA DE DON JUAN
de Mozart.

Leporello, dirige sus palabras a Donna Elvira. "Madamina, il catalogo é questo..."

"Señorita, el catálogo es este

de las bellas [mujeres] que amó mi patrón;

un catálogo que yo mismo hice;
observad, leed conmigo.



En Italia, seiscientas cuarenta;
En Alemania, doscientas treinta y una;
Cien en Francia; en Turquía, noventa y una;
Pero en España son ya mil tres.

Entre éstas hay campesinas,
camareras, ciudadanas,
condesas, baronesas,
marquesas, princesas,
y hay mujeres de toda condición,
de toda forma, de toda edad.

De las rubias, él tiene costumbre
de halagar la gentileza;
de las morenas, la constancia;
de las pálidas, la dulzura.
Quiere para el invierno a la gordita,
quiere para el verano a la flaquita;
es la corpulenta majestuosa.
la pequeña es más graciosa.

A las viejas las conquista
por el placer de ponerlas en la lista;
su pasión predominante
es la joven principiante.

No le importa que sea rica,
que sea fea, que sea bella;
mientras lleve la faldita,
vos sabéis lo que hará."



LA LISTA DE BORGES

(Argentino / 1889-1986)



El idioma analítico de John Wilkins


"...el doctor Franz Kuhn atribuye a cierta enciclopedia china que se titula Emporio celestial de conocimientos benévolos. En sus remotas páginas está escrito que los animales se dividen en 
(a) pertenecientes al Emperador, 
(b) embalsamados, 
(c) amaestrados, 
(d) lechones, 
(e) sirenas, 
(f) fabulosos, 
(g) perros sueltos, 
(h) incluidos en esta clasificación, 
(i) que se agitan como locos, 
(j) innumerables, 
(k) dibujados con un pincel finísimo de pelo de camello, 
(1) etcétera, 
(m) que acaban de romper el jarrón, 
(n) que de lejos parecen moscas. 
El Instituto Bibliográfico de Bruselas también ejerce el caos: ha parcelado el universo en 1000 subdivisiones, de las cuales 
la 262 corresponde al Papa; 
la 282, a la Iglesia Católica Romana; 
la 263, al Día del Señor; 
la 268, a las escuelas dominicales; 
la 298, al mormonismo, y 
la 294, al brahmanismo, budismo, shintoísmo y taoísmo. No rehúsa las subdivisiones heterogéneas, verbigracia, la 179: "Crueldad con los animales. Protección de los animales. El duelo y el suicidio desde el punto de vista de la moral. Vicios y defectos varios. Virtudes y cualidades varias."



LA LISTA DE WISLAWA SZYMBORSKA

(Polonia / 1923-2012 / Premio Nobel 1996)

Posibilidades

Prefiero el cine.
Prefiero los gatos.
Prefiero los robles a orillas del río.
Prefiero Dickens a Dostoievski.
Prefiero que me guste la gente
a amar a la humanidad.
Prefiero tener en la mano hilo y aguja.
Prefiero no afirmar
que la razón es la culpable de todo.
Prefiero las excepciones.
Prefiero salir antes.
Con los médicos prefiero hablar de otra cosa.
Prefiero las viejas ilustraciones.
Prefiero lo ridículo de escribir poemas
a lo ridículo de no escribirlos.
En el amor prefiero los aniversarios
que se celebran todos los días.
Prefiero a los moralistas
que no me prometen nada.
Prefiero la bondad del sabio a la del demasiado crédulo.
Prefiero la tierra vestida de civil.
Prefiero los países conquistados a los conquistadores.
Prefiero tener reservas.
Prefiero el infierno del caos al infierno del orden.
Prefiero los cuentos de Grimm a las primeras planas
del periódico.
Prefiero las hojas sin flores a la flor sin hojas.
Prefiero los perros con la cola sin cortar.
Prefiero los ojos claros porque los tengo oscuros.
Prefiero los cajones.
Prefiero muchas cosas que aquí no he mencionado
a muchas otras que tampoco he dicho.
Prefiero el cero solo
al que hace cola en una cifra.
Prefiero el tiempo de los insectos al tiempo de las estrellas.
Prefiero tocar madera.
Prefiero no preguntar cuánto me queda y cuándo.
Prefiero tomar en cuenta incluso la posibilidad
de que todo tiene una razón de ser.

Ilustraciones:
David Teniers el Joven, El archiduque Leopoldo Guillermo de Habsburgo, en su galería de pinturas de Bruselas, 1651
Carl Spitzweg, Ratón de biblioteca, 1849.
Johan Hamza, 1850-1927, Caballero elegante en la biblioteca. 
Leporello, dirige sus palabras a Donna Elvira. "Madamina, il catalogo é questo..."

jueves, 10 de abril de 2014

Literatura / Bioy Casares

ABC

"-No me parece atinada la observación -dijo el doctor mirando formidablemente a Antúnez y omitiendo, en la última palabra, la letra "b". Hay gente que gusta de la bullanga y gente que no. Yo me casé como Gauna, sin toldo colorado ni tanto zonzo mirando -buscó la mirada a todos los circunstantes- ¿tienen algo que objetar?
Por cierto que ninguna "b" entorpeció el verbo."

"El sueño de los héroes". Adolfo Bioy Casares

Literatura / García Márquez

DE AMOR Y OTROS DEMONIOS
Gabriel García Márquez
Historia simple, música en la prosa, poesía en el relato... 

A Sierva María de Todos los Ángeles ya la había mordido el perro rabioso. Su padre, el marqués de Casalduero, fue a buscar muy temprano a Abrenuncio el médico del lugar para que revise a la niña. Así lo hizo.
Dice el texto:

“ (El médico) Insistió una vez más en que el pronóstico no era alarmante. La herida estaba lejos del área de mayor riesgo y nadie recordaba que hubiera sangrado. Lo más probable era que Sierva María no contrajera rabia.

«¿Y mientras tanto?», preguntó el marqués.

«Mientras tanto», dijo Abrenuncio, «tóquenle música, llenen la casa de flores, hagan cantar los pájaros, llévenla a ver los atardeceres en el mar, denle todo lo que pueda hacerla feliz». Se despidió con un voleo del sombrero en el aire y la sentencia latina de rigor. Pero esta vez la tradujo en honor al marques: «No hay medicina que cure lo que no cura la felicidad». “

domingo, 6 de abril de 2014

Literatura / Umberto Eco

ECO
Dice Umberto Eco
"No me encuentro entre los malos escritores que dicen que sólo escriben para sí mismos. Lo único que los escritores escriben para sí mismos son las listas de la compra, que les ayudan a recordar lo que tienen que comprar y pueden tirar después. Todo el resto, incluidas las listas de la lavandería, son mensajes dirigidos a alguien..."
Confesiones de un joven novelista. 2011.

Literatura / Humberto Constantini

TAREA
Humberto Costantini

Han de saber 
que cuando en la oficina no hay trabajo, 
yo trabajo, 
trabajo como un negro, 
sudo tinta, 
ando detrás de pájaros azules, 
me meto en grandes líos con los sueños, 
me desangro en palabras,
salgo a cazar ballenas y crepúsculos,
domestico elefantes
(hay que ver qué furor el de la selva)
le explico al faraón cosas del tiempo,
hago el amor a veces,
lucho con los zulúes cuerpo a cuerpo,
tengo que abrirme paso en un perfume,
volver para las doce,
morirme,
andar recuerdos.
Tengo que hablar con Dios,
volverme loco,
lanzar varias proclamas de justicia,
escapar de la hoguera,
vestirme de jamás para un entierro.
No descanso ni un minuto,
me doy un gran trajín con las cigarras,
me cito con Lenin y arreglo el mundo,
llamo a larga distancia,
digo anote en mi agenda: Nazareno,
trato cosas del aire con gaviotas,
compro verdes, azules, amarillos
y los despacho por expreso al cielo.
Hago arreglo con nubes,
firmo tardes de otoño con llovizna,
corro a cambiar estrellas que andan flojas,
promuevo madreselvas,
dicto inviernos...

cuando el jefe me mira y dice ejem,
ya que usted no hace nada y tiene tiempo...